Esa obsesión moderna por la cantidad de libros que se lee en una semana, mes o año nos hace perder de vista el bosque por estar contando los árboles.
En un mundo obsesionado con las métricas, la analogía del bosque y los árboles es genial. ¿Cómo fomentar una cultura lectora que valore más la profundidad que la cantidad?
En un mundo obsesionado con las métricas, la analogía del bosque y los árboles es genial. ¿Cómo fomentar una cultura lectora que valore más la profundidad que la cantidad?